Cuando llegamos a principios de abril, el campo de refugiados de Alexandreia sólo llevaba abierto dos días y en él residían unos 250 refugiados sirios. La capacidad del campo creció rápidamente hasta alcanzar los 800 actuales, pero las condiciones de vida permanecieron igual de duras. Familias que habían escapado de la guerra civil con muy pocas pertenencias se encontraron viviendo en tiendas atestadas de gente, con escasa comida, retretes químicos que dejaban mucho que desear y un campo propenso a las inundaciones.

Desafortunadamente, no sólo prevalecen estas condiciones iniciales, sino que ahora también tienen que vivir a más de 40º C de temperatura y rodeados de nubes de mosquitos.
Aún nos queda mucho por hacer, pero gracias al espléndido trabajo de nuestro equipo de voluntarios y a nuestros generosos donantes, podemos estar orgullosos de lo que hemos conseguido en tan poco tiempo para mejorar sus condiciones de vida.

Cesta normal de productos esenciales
Todos los residentes del campo reciben actualmente una cesta gratis de productos esenciales dos veces a la semana a través de nuestra tienda gratuíta: leche, galletas, artículos de aseo, té, café, azúcar, comida de bebé, pañales, toallitas húmedas, anticonceptivos y detergente.

Además de estos productos, ofrecemos también otros: juguetes, paquetes para recién nacidos, enseres para las tiendas como por ejemplo teteras, linternas y cargadores solares, mosquiteros y after-bite y hijabs.

Nos resulta difícil satisfacer todas sus necesidades, pero disponemos de un sistema y servicio que aseguran que el proceso transcurra de manera calmada, digna, amistosa y equitativa para todas las familias del campo.
Nutrición mejorada
Además de la comida habitualmente ofrecida en la tienda, hemos añadido también fruta y verdura como mínimo dos veces por semana. Dependiendo de los fondos, repartimos a la vez yoghurt, miel y conservas de pescado.
Estos productos adicionales se ofrecen unas veces en la tienda y otras veces se distribuyen tienda a tienda. En todo momento priman la igualdad y la dignidad.

Resulta evidente, pero nos lo confirma también la magnífica organización médica in situ: la salud general ha mejorado.
Ropa y zapatos nuevos
Cuando mostramos a la ONU y a otras organizaciones nuestra labor, siempre se quedan impresionados con nuestra tienda gratuíta y con nuestro sistema de distribución, pero lo que más les maravilla es nuestra tienda de ropa, llamada la Boutique. Lo que empezó siendo una habitación llena de montones de ropa desordenada tiene ahora un abastecimiento continuo de prendas de calidad que se adecuan al clima exterior, todas ordenadas y colgadas en perchas. Disponemos también de un probador, espejos y de un espacio de juego para los niños. Los residentes tienen un horario determinado para venir a la tienda y poder así seleccionar tranquilamente lo que necesitan de la lista de prendas que les corresponde cada vez, como por ejemplo 2 prendas de ropa interior, 2 camisetas, 1 par de pantalones o una falda.

En tres semanas podemos abastecer de prendas a todos los habitantes del campo (1 semana para los niños, 1 semana para las mujeres y 1 semana para los hombres).
Los zapatos, productos muy demandados que suelen conllevar una dosis de emociones durante su distribución, son gestionados aparte. Antes de repartirlos debemos organizarlos, dar a los residentes a elegir entre máximo de cinco pares y permitirles probarlos, razón por la cual nos debemos asegurar de antemano que contamos con suficientes voluntarios y pares de zapatos para llevar a cabo la labor. ¡Los zapatos de calidad siempre son bienvenidos!

Un espacio comunitario para actividades diversas
Hemos renovado una de las grandes habitaciones abandonadas para

tener en el campo un espacio donde celebrar reuniones, llevar a cabo todo tipo de actividades y resguardarse del clima. Hemos puesto ventanas, puertas, mosquiteras, lámparas y enchufes. La habitación ha sido completamente renovada y el suelo se ha pulido.
Nuestra actividad inaugural fue una proyección cinematográfica para los niños y animamos a los residentes del campo a llevar a cabo muchas más actividades.

Tenemos planeado instalar ordenadores en la sala para que los refugiados tengan acceso regular a Internet. En estos momentos estamos en proceso de búsqueda de donantes para que nos puedan ayudar a conseguirlo.
actividades físicas para los niños
A día de hoy, regularmente llevamos a cabo actividades físicas para los niños del campo por las tardes. Hemos repartido unas cien pelotas de fútbol y juguetes para los niños y IRC dirige actividades para ellos durante el día. A pesar de ello, los niños siguen teniendo mucho tiempo libre y mucha energía entre sus manos.

Hemos organizado entrenamientos de fútbol con un ex-profesional que dirige una academia de fútbol en Londres y hemos organizado partidos de fútbol con equipos griegos de los alrededores. Para las chicas hemos organizado entrenamientos de voleibol y baloncesto.

Hemos tenido que hacer grupos de chicas y chicos y dividir las distintas edades para que las actividades transcurran correctamente. La organización de estas actividades requiere mucho tiempo pero es extremadamente satisfactorio ver a los niños divertirse.
Almacenamiento adicional

Transformar una de las grandes habitaciones del campo en un mini-almacén con iluminación y estanterías nos ha dado espacio para clasificar y ordenar las donaciones que recibimos. Usamos este almacén a diario para reabastecer la tienda de comida y la boutique, y poder así ser más eficientes, mantener un suministro consistente para todo el campo y asegurarnos de que la calidad de los productos que ofrecemos esa alta.

Nos estamos labrando una reputación como organización fiable de la cual se puede esperar una ayuda de calidad para todos los residentes del campo. A medida que esta reputación ha ido creciendo, hemos comenzado a recibir ofertas de grandes entregas y por tanto hemos decidido alquilar un almacén más amplio a unos 8 kilómetros de Alexandreia y del campo de refugiados. Con acceso las 24 horas del día y montacargas, ahora podemos aceptar donaciones mucho más grandes. Así que, si nos queréis enviar un camión entero de donaciones, ¡estamos preparados para gestionarlo!
Apoyando la economía local

Intentamos gastar lo máximo que podemos en la economía local para asegurarnos de que la comunidad local se beneficia de nuestra organización tanto como los refugiados. El hotel de gestión familiar de Alexandreia, los bares y los restaurantes se han beneficiado directamente de los 80 días de voluntariado que llevamos hasta la fecha y hemos gastado alrededor de 50.000€ en tiendas y proveedores de servicios locales.
La comunidad local se ha mostrado extremadamente solidaria y, teniendo en cuenta la situación económica de Grecia, es importante que los refugiados no sean percibidos como una carga más.
Colaboración con las otras organizaciones no-gubernamentales del campo
Trabajamos en estrecha colaboración con el ejército griego, la Agencia de Refugiados de las Naciones Unidas (ACNUR), el hospital universitario eslovaco de Santa Isabel, el Comité Internacional de Rescate e InterSOS. Asistimos a una reunión semanal de coordinación para ver cómo podemos apoyarnos mutuamente y así mejorar la ayuda a los refugiados.

Al ser una pequeña organización descentralizada podemos actuar rápidamente y llevar a cabo importantes proyectos en el campo que las grandes organizaciones tardarían más en completar. Esto incluye, entre otras cosas, una plataforma en torno al área de lavado para que los niños se puedan lavar las manos más fácilmente y una serie de bancos para que la gente pueda sentarse a la sombra. Nuestro sistema de distribución también implica que podamos ayudar a las otras organizaciones a cumplir con sus compromisos en el campo (por ej. colchones, material de suelo y mosquiteras en nombre de la ONU y productos higiénicos en nombre del CIR).

El hospital universitario eslovaco de Santa Isabel lleva a cabo servicios médicos en el campo y no cuenta con mucho presupuesto para utilizar en el campo. Por esta razón, hemos pagado para que pongan baldosas en sus dos habitaciones para que estas puedan ser utilizadas como clínicas profesionales y les suministramos periódicamente leche en polvo para bebés, anticonceptivos femeninos e importantes materiales de tratamiento.
Como dijo un representante de la ONU: “Refugee Support es el alma y el corazón de Alexandreia”.
Futuras actividades
Tenemos más planes para Alexandreia. Estamos creando una cocina comunitaria para proporcionar un plato de comida caliente, sabrosa y nutritiva para cada residente del campo y hemos despejado una parte del campo para poder construir un espacio de juego de gran calidad para los niños. También debemos mantener los suministros de la tienda gratuíta y tenemos planeado aumentar y diversificar la cantidad de productos que ofrecemos.

También hemos empezado a proporcionar productos higiénicos y comida al campo vecino de Giannitsa, que actualmente acoge a 450 refugiados sirios. Las condiciones en ese campo son aún peores que en el de Alexandreia – no tienen suministro periódico de productos básicos, hay muy pocos espacios a la sombra y está atestado de gente. Al igual que en Alexandreia, hay muchos niños pequeños, bebés y mujeres embarazadas. Actualmente, visitamos el campo tres veces por semana con una furgoneta llena de provisiones y debemos asegurarnos de que podamos mantener este nivel de servicio para fomentar la confianza y la comprensión.

Si quieres ayudarnos a continuar ofreciendo este valioso trabajo y apoyar nuestros planes futuros, por favor dona. Todos los voluntarios trabajan sin remuneración y corren con sus propios gastos. Por lo tanto todo lo que dones será en beneficio de los refugiados: Haz click aquí para donar